(CABA, 24.Abr.2024 / A1 Noticias) El intendente de Rauch detalla que “hicimos un pedido de reunión y afortunadamente pudimos concretarlo rápidamente. Junto a todos los intendentes del Foro, el gobernador nos recibió con prácticamente todos sus ministros. Los temas centrales tenían que ver con el sistema de salud, la seguridad y el tema de la continuidad de las obras”, adelanta.

Entre las respuestas obtenidas a dichos reclamos, Suescún agrega que “en el día de ayer y hoy hemos cobrado de IOMA, pero el problema va bastante más, que es el funcionamiento de la obra social. Hay otros temas que exceden a eso y tienen que ver con el precio de los medicamentos y sobre eso estuvimos trabajando en dos propuestas, una a nivel provincial, que nos acercó el ministro de salud, y que el gobernador lo ha llevado a la legislatura”.

Por otra parte, desde los intendentes del radicalismo están planteando “la necesidad de contar con alguna norma a nivel nacional que rescate el espíritu de lo que fue la Ley Oñativia, que durante el gobierno de Arturo Illia, trabajó mucho con el tema de los genéricos, con un tope de los medicamentos. Declaró un bien esencial al medicamento, porque entendemos que se necesita algún dispositivo de protección social frente a lo que se vive”, dice el jefe comunal.

Dicha Ley que llevó el nombre del ex ministro de Salud de Illia estaba ligada a la producción y fabricación de medicamentos, y provocó una fuerte reacción de los laboratorios que fueron los que empujaron la caída del gobierno. ¿No temen que vuelvan a la carga los laboratorios, sobre todo las multinacionales?

Suescún es contundente con la respuesta: “Nosotros entendemos siempre que las peleas hay que darlas, no nos podemos quedar con los brazos cruzados cuando tenemos un vecino que es diabético y nos golpea la puerta porque tiene que comprar insulina, que le subió el 800% y muestra el carnet de la obra social que no se lo cubre y no tiene plata. No le podemos decir, desregularon el mercado y hay que ajustar los números en ese sentido”, sostiene.

Agrega que “esta es una materia que necesariamente nosotros entendemos que sea como sea, no podemos bajar los brazos y tenemos que luchar para conseguir algún tipo de paliativo”. Muchos sostienen que estas posturas sorprenden, ya que un grupo de intendentes no alineados con el gobierno provincial impulsan leyes a favor de la gente y de los más necesitados.

“Por estos días varios colegas suyos me preguntan respecto de si el radicalismo está cerca del gobernador Kicillof, si el radicalismo está cerca de Milei, Yo digo, sinceramente y con mucha humildad, que el radicalismo es una fuerza preexistente a todas esas otras ¿Por qué hay que referenciar al radicalismo cerca o lejos de él?”, se pregunta y asegura que “el radicalismo tiene que fortalecer su identidad, construir más identidad, aggiornarse en los tiempos que vienen”.

Respecto al rol del estado, asegura que “creemos que la salud, la educación, la obra pública, tiene que ser el rol del Estado”, aclarando que “creemos profundamente en el saneamiento de las cuentas públicas y la transparencia, pero nosotros creemos que tiene que haber un Estado, con todo el mercado que sea posible, pero con todo el Estado que sea necesario”.

Destaca el rol de los intendentes como la primera cara visible del Estado y considera que “nuestra obligación trabajar. Si nosotros acercándonos en una reunión podemos resolver un problema del vecino y eso significa que estamos reunidos y coincidimos con el gobernador ¿Cuál es el problema? Si mañana nos llama el presidente y podemos coincidir en algo o podemos hacerle entender que hay que tomar algún tipo de medida en este sentido nos parece que es necesario”, explica Suescún.

En relación a la economía doméstica, el vecino de Rauch, “está con muchas complicaciones”, dice el intendente. “No es un año fácil, no venimos de otro año fácil, los pueblos que son agropecuarios, a veces están más castigados que otros por un mal pasar del sector y en otros momentos pueden tener un poco de oxígeno. Eso ocurre cuando al productor agropecuario le va bien y eso derrama en la economía doméstica. Que haya trabajo en la albañilería, que la gente gaste en la peluquería, en la verdulería. No se avizora algo muy bueno, los costos de los insumos están altos y el tipo de cambio ha quedado planchado entonces no hay mucha competitividad. Y al asalariado, ¿qué le voy a explicar? Está como en todos lados, no ha habido organización, empresa ni nivel del Estado que haya podido acompañar una paritaria con la devaluación, eso no fue posible”, se lamenta.

Milei es un presidente que no cree en el Estado, no cree en la educación ni en la salud pública. ¿Cuál es la mirada que tiene el radicalismo en este sentido? “Seguramente tiene más de una, por eso cuesta amalgamar al radicalismo y es imperioso que el radicalismo fortalezca su identidad”, reitera. “A partir de ahí va a ser mucho más fácil encontrar coincidencias y que podamos agruparnos, trabajar detrás de la unidad, eso me parece central”, manifiesta.

“Para quien trabajamos todos los días en la resolución del problema de la gente cara a cara a veces duele, escuchar que el Estado es una organización criminal. Somos creadores de infancias felices, un antagonismo entre una definición y la otra y la realidad; nuestro municipio recibe a todos los chicos de 15 o 45 días, 3 años en esa primera infancia que es el tiempo donde el cerebro se desarrolla y no se puede recuperar nunca más. Los hospitales públicos que están recibiendo a todos los que no pueden pagar las prepagas y entonces van a que el hospital los atienda y todo lo demás”, dice.

Pareciera que los intendentes que tienen responsabilidad de gestión, están convalidados por el voto popular y tienen un trabajo territorial, tienen una línea de pensamiento distinta al de algunos dirigentes encumbrados que recorren los pasillos de los medios de comunicación y emiten opiniones totalmente o diametralmente opuestas. “Yo estoy convencido de que a la política hay que imprimirle mucho más espíritu de los gobiernos locales. No importa en qué partido político. Hay decisiones políticas que se alejan de la realidad muchas veces y creo que es uno de los grandes temas a resolver en este país”, imagina.

“Es muy importante fortalecer los gobiernos locales, trabajar de una vez por todas en la autonomía de los municipios en la provincia de Buenos Aires. Tenemos una norma que nos rige, que es inconstitucional y no respeta la reforma del ´94. Y el tema de cómo se distribuyen los recursos en este país. Los municipios son el lugar donde la gente intenta resolver el 80% de los problemas. Sin embargo, reciben sólo el 6% del gasto público consolidado del país. Si los recursos bajaran más, si se tomaran modelos de distribución distintos como países como Suecia, digamos, si aspiráramos a que los recursos estén cerca de la gente, vamos a ganar en eficacia, en eficiencia y en transparencia”, afirma Suescún.

También defiende los impuestos o tasas locales como la que intentan cobrar algunos municipios del conurbano. “Para nosotros la tasa vial es la más importante de los recursos locales. Siempre se cobró y se cobra. El gran debate siempre es dar el servicio que corresponde a esa tasa. El compromiso es mantener la red caminera en condiciones, por ahí transita la principal producción de y se necesita para que la gente pueda vivir en el campo, pueda enviar a los chicos a la escuela, pueda garantizarse que puede llegar a un efector de salud. Entonces son muy importantes los caminos. La tasa vial para nosotros es una tasa vigente de hace mucho tiempo”, completa Suescún